Actualmente es el continente que más concentra este tipo de energía, y aún así proyecta un crecimiento de 66% para el 2023.
Un informe liberado por WindEurope, organización que se dedica a analizar el mercado y promover el uso de este tipo de energía, asegura que en cuatro año más el viejo continente podría llegar a una capacidad instalada de 28 gigavatios.
El potencial eólico se calcula en función de la distribución de la velocidad del viento. Los aerogeneradores situados en sitios donde las medias de velocidad del viento son de 8 metros por segundo en la altura del eje del rotor producen entre el 75% y el 100% más de electricidad que aquellas donde el viento sopla a una media de 6 metros por segundo. Un aerogenerador de 1,8 MW situado a un buen emplazamiento produce más de 4,7 millones de unidades de electricidad cada año. Esto es suficiente para satisfacer las necesidades de más de 1.500 hogares, informa el sitio de Generadoras de Chile.
El grado de expansión dependerá de la capacidad de los Gobiernos para alentar nuevas inversiones. El desarrollo eólico en tierra en Alemania, el mayor mercado de Europa, se ha estancado en los últimos meses. Esto ha dado paso a que se genere más desarrollo en instalaciones terrestres en países como España, Suecia y Noruega. Mientras, las turbinas ubicadas en el mar crecerán en Reino Unido, Países Bajos y Alemania, consigna un artículo de la revista de negocios, América Economía.
En nuestra región
El último tiempo el costo de la tecnología eólica han ido disminuyendo considerablemente experimentando un aumento nuestra capacidad instalada. En Chile, a diciembre de 2017 existían 1.305 MW de instalaciones de energía eólica, logrando una penetración cercana al 6% en el sistema.
Las principales conclusiones de un estudio realizado por el Coordinador Eléctrico Nacional anticipa que además, la demanda de energía practicamente se duplicará en los próximos 20 años; de 70.282 GWh en 2018 a 128.776 GWh en 2038, razón por la cual en nuestro país el desafío es aún mayor.
“Es plenamente posible suplir esa demanda con energía renovable y que para sostener ese crecimiento es necesario dar señales que alienten la inversión para dar flexibilidad al sistema eléctrico, a través del desarrollo de servicios complementarios, almacenamiento y la adecuada capacidad de transmisión eléctrica”, indica el director ejecutivo de Generadoras de Chile, Claudio Seebach, en un artículo del sitio oficial del gremio.