Más de 60 representantes de países de todo el mundo se reúnen hoy en la Cumbre de Acción Climática -en Nueva York- convocada por la ONU. Cita internacional que su secretario general, Antonio Guterres, calificó como decisiva para el destino del planeta.
Este foro, que busca comprometer a los gobiernos más allá de sus tradicionales discursos, tiene como objetivo combatir lo que la organización internacional considera que dejó de ser un conversatorio sobre cambio climático y pasó a ser una crisis que requiere medidas y acciones inmediatas.
“Es un encuentro clave en el camino hacia la COP25 y que nos permitirá avanzar en enfrentar este desafío que tenemos como humanidad. No se convocaba a una cumbre de esta envergadura asociada a cambio climático desde el 2014”, comentó la ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt.
La Cumbre debe servir ,entre otras cosas, para movilizar y aumentar la ambición política que dará como resultado unos compromisos de acción mejorados e irreversibles en los planes nacionales de acción climática para reducir de forma considerable las emisiones, fortalecer la resiliencia climática, incitar la ascendente acción de las ciudades, regiones y sociedad civil, pero también del sector privado y contribuir con las coaliciones de las múltiples partes interesadas que elaborarán soluciones ambiciosas en las áreas de acción de la Cumbre, según consigna el sitio oficial del foro.
Los líderes mundiales además de acudir con estrategias concretas, tienen el desafío de impulsar los compromisos adquiridos en el Acuerdo de Paris, ad portas de una fase decisiva respecto a la implementación de medidas pactadas en 2015 y con las que se pretende hacer un giro 180° para el 2050 en materia energética y climática. Para asegurar con esto una transición global hacia las energías renovable, ciudades y agricultura sustentables, una ordenación sostenible de los bosques y océanos, la adaptación a los impactos climáticos y la convergencia del financiamiento público y privado con una economía de cero emisiones netas.